Merecido, sufrido, inteligente y muy muy madura. Así ha sido la temporada de Marc Márquez, demostrando que ha aprendido la lección más que nunca. Cuando nadie se esperaba que lo hiciera, ni más ni menos, que en casa de Honda; las caídas primero de Rossi y después de Lorenzo y su brillante victoria, le han dado el tercer título de Campeón del Mundo de MotoGP a Márquez.
No había ganado nunca en Motegi en la categoría reina y lo ha hecho, además, proclamándose campeón. El piloto con más cabeza de la historia. Se lo ha dado todo a Honda, y hoy su primer campeonato en casa. Inmejorable.
Desde la primera fila de parrilla por décima vez esta temporada, ha salido el piloto de Honda con una sola idea en la cabeza, como dijo en la rueda de prensa del sábado, «el objetivo no es la victoria, sino el podio», pero ha ocurrido lo «inesperado». No por la victoria, sino por las caídas de dos pilotos tan competitivos como son Valentino y Jorge.
«No me esperaba para nada ser campeón. De hecho, cuando he cruzado la línea de meta, he pensado -no habrá nada preparado-, pero he visto a mi hermano y a Jose en la primera curva y cuando he llegado al corralito, he visto que el equipo lo tenía todo preparado…Camisetas, cartulinas…todo, decía Marc, con la euforia a flor de piel.
No se puede decir que le han regalado nada, pues es el Campeonato que más sufrido hasta ahora. A pesar de tener tan sólo 23 años de edad, la realidad es que el de Cervera ya cuenta con cinco mundiales en su palmarés (dos de ellos en 125 y 250), motivo por el cuál en sus camisetas, han grabado «give me five», siendo este título, el tercero en MotoGP y el quinto de su carrera profesional. Marc tiene claro las dificultades por las que ha pasado, pero quiere seguir haciendo historia: «La verdad es que poder decir que tengo cinco Campeonatos con 23 años es una cosa importante, pero no quiero que se frene aquí. De momento, saborearé este título, que es muy importante, y luego ya veremos, pero es importante no ponerse un límite».
El piloto de Honda no se escondía de la preocupación del equipo a principio de temporada, tras tantos problemas con la adaptación a la nueva centralita Magneti Marelli y los neumáticos Michelin. «Al principio de temporada escuché a algunos del equipo diciendo -si este año ganamos, será un milagro-. Todos somos humanos, me podéis ver sonreír, pero al final la presión existía y me la ponía yo mismo. Después de los errores del año pasado y como acabó el año, quería ganar este», así lo decía Marc y así lo ha cumplido ante las dificultades. El de Cervera también ha recordado como fue el planteamiento antes de comenzar el campeonato: «Recuerdo que tuve una reunión con los ingenieros de Honda y les dije – Cambiaré mi mentalidad e intentaré sumar puntos, pero como máximo a mitad de temporada, tenéis que ayudarme; traer algo.. Han ido poco a poco pero en Brno llegaron unas alas, luego el lunes probamos algunas cosas de electrónica que nos ayudaron un poco, y es lo que les pedía, sólo un poquito más para poder ganar en los circuitos que nos va bien».
El piloto nunca ha dudado de la capacidad de la marca: «He confiado en Honda siempre, incluso renové el contrato cuando peor estábamos con la moto, y era fácil decir – bueno cambio y ya está-. Mi cabeza y mi corazón están en Honda y siempre he confiado en ellos». Ahora, a disfrutar de las carreras que quedan: «En alguna carrera seguro que volverá el Marc de antes. A ver si podemos conseguir una victoria más. Luego en Valencia, habrá mucho cambio imprevisible, ya que estamos centrados en el motor nuevo, aunque también el de este año, para tenerlo de opción y ver si podemos dar un pasito».
Sobre la carrera de Valentino, tiene claro que ha sido una sorpresa: «He visto a Rossi al principio de carrera un poco nervioso, ha salido mal, cosa que nunca hace, y luego me ha adelantado tres veces, que normalmente en principio de carrera no lo hace, se colaba de frenada, iba al límite, y he pensado que esa pelea no me convenía».
Lo tenía muy claro. Este año iba a por él y ya lo tiene bajo el brazo. La espina clavada se ha ido quitando poco a poco hasta el día de hoy, que ha podido gritar a los cuatro vientos que finalmente lo ha conseguido.
Rossi y Lorenzo al suelo
Al contrario que Honda, día negro para Yamaha, que ha visto como sus dos pilotos se iban de Japón sin sumar ni un punto.Curiosa caída de Valentino Rossi que todavía ni él mismo entiende. «En la primera vuelta me ha superado Lorenzo, me sentía bien, pero Márquez ha ido rápido a superar a Lorenzo. Sinceramento, no lo entiendo,no creo que fuera muy rápido ni largo, estaba yendo bien. Ha sido una pena. No me lo esperaba para nada. Estaba difícil superar a Márquez, pero creo que tenía ritmo», explicaba el piloto de Yamaha, concluyendo que «Márquez es el merecedor de este campeonato, ha sido el más regular. Ha rodado muy fuerte y es lo justo».
Por su parte, Jorge Lorenzo ha reconocido que «las dos caídas de este fin de semana no hubieran surgido el año pasado. Aquí a la que fuerzas un 0.2% más te vas al suelo. Ese es el problema. Baja unos grados la temperatura y te vas al suelo. Aún así, son los mismos neumáticos que tiene todo el mundo y muchos han acabado la carrera; eso quiere decir que se podía terminar».
Sobre el actual campeón ha comentado que: «Este año ha sido el mejor en muchos sentidos, en regularidad, en constancia, en inteligencia. En saber aguantar encima de la moto en carrera. En carreras que no tenía un handicap encima de la moto, ha aguantado ahí en segunda o tercera posición y así se ganan campeonatos. El mejor con diferencia este año e intentaremos batirle al futuro». «Las estadísticas lo dicen todo de él. Muchas victorias y ya cinco títulos pero en el motociclismo nunca se da nada por sentado. Intentaremos batirle el año que viene».
Sobre Yamaha ha dejado claro que «seguramente hemos sido la marca que menos ha evolucionado, hemos visto hasta cuatro marcas que pueden ganar y tanto la Ducati como la Suzuki está en un gran nivel».
Podio completado por Dovizioso y Maverick
Andrea Dovizioso ha conseguido su cuarto podio de la temporada, terminando en segunda posición, tras estar luchando en la tercera durante toda la carrera. Aunque no le ha podido dar la victoria a Ducati, es la tercera vez que termina segundo y no subía al podio desde Austria.
Primero ha sido Aleix Espargaró el que le ha perseguido para quitarle el tercer lugar que ocupaba antes de la caída de Jorge Lorenzo, pero finalmente este ha sido superado por su compañero de equipo, Maverick Viñales. Al hermano mayor de los Espargaró, se le resiste el podio, resultado por el que sueña antes de terminar su etapa en Suzuki.
«Estoy satisfecho pero más enfadado que nunca a la vez. Hemos hecho un gran fin de semana, trabajando muy duro y mejorando mucho la moto. Ha sido la primera carrera en todo el año que no se me cerraba la dirección, que podía ser agresivo. Quizás he cometido algún error detrás de Dovizioso y he cambiado el mapa un poco antes. He hecho demasiado spinning y en las últimas vueltas me he quedado sin tracción. Una pena pero quedan tres carreras y esta forma de conducir y este ritmo no es el que hemos tenido todo el año, así que voy a intentar conseguir el podio hasta el final». Éstas han sido las palabras de Aleix, que también se lamentaba de la no continuidad en la marca: «La Suzuki está en un gran momento y es una pena que no podamos dar continuidad al proyecto. Está muy cerca de las mejores motos de la parrilla, sigue faltando potencia, pero si consigue un poco más, estoy seguro que va a estar muy cerca de la Honda y la Yamaha».
La quinta posición la ha ocupado Cal Crutchlow, por detrás Pol Espargaró y Alvaro Bautista. El de Aprilia ha alcanzado un buen ritmo, entrando en el top10 desde la carrera de Silverstone.
GRAN PREMIO MOTUL DE JAPÓN
1- Marc Márquez (42’34.610)
2- Andrea Dovizioso (+2.992)
3- Maverick Viñales (+4.104)
4- Aleix Espargaró (+4.726)
5- Cal Crutchlow (+15.049)
6- Pol Espargaró (+19.654)
7- Alvaro Bautista (+23.032)
8- Danilo Petrucci (+28.555)
9- Scott Redding (+28.802)
10- Stefan Bradl (+32.330)
14) Tito Rabat (+54.760)
17) Héctor Barberá (+1’42.966)