Es una evidencia, pero hay que repetirlo una vez más: CON MARC EN ACCIÓN TODO CAMBIA. Todo se transforma en épico, increíble, espectacular, apasionante, irrepetible, épico, saca el máximo de sus rivales y tienen que exprimirse al límite de sus posibilidades y, por supuesto, gana el espectáculo. Por ello afirmo que es el mejor piloto que yo he visto en mi vida, por lo que hace y por lo que obliga a hacer.
Pero además hay que reconocer que se ha abierto una batalla deportiva que voy a calificar de homérica: ¿Quién asaltará la segunda plaza oficial de Ducati? De aquí al final de campeonato Martín y Márquez no se darán ni un milímetro de margen, combate del que saldrá beneficiada Ducati y con la duda de cómo lo vivirá el actual campeón, Bagnaia, por ahora intocable en Borgo Panigale. Lo que es seguro es que los 119.145 espectadores que se han dado cita hoy en un circuito histórico -ambientazo sin paliativos- han salido felices y con ganas de más.
Pues a por más en Barcelona Montmeló